Una actriz que multiplica su presencia en el cine

Ana Celentano

Con el estreno de la semana pasada del documental "Alicia y John, el peronismo olvidado", en el que protagoniza a Alicia Eguren y la cinta de Boy Olmi "Sangre del Pacífico", la actriz platense Ana Celentano se encuentra en un importante momento de su carrera actoral con tres filmes en la cartelera cinematográfica.

A los recientes estrenos y la ya instalada "Las viudas de los jueves", donde la actriz interpreta a Teresa, se suman en las próximas semanas otros dos largometrajes que la tienen como protagonista, "Silencios", de Mercedes García Guevara, y como actriz de reparto en "Fantasma de Buenos Aires", de Guillermo Grillo.

"Estoy en un momento muy especial y me siento muy feliz en relación con el trabajo; de algún modo para mí es como un sueño cumplido porque cuando empecé a estudiar teatro a los 14 años mi fantasía era trabajar en cine y la continuidad de papeles que se está presentando es muy significativa", cuenta la actriz.

"En algún sentido estoy sorprendida por cómo se suceden las cosas porque es bastante común que los que nos dedicamos a una actividad artística tengamos muchos momentos sin trabajo, y yo estoy viviendo una etapa en la que aparecen distintas propuestas", aclara.

"La continuidad -detalla- es muy importante porque es la propia experiencia que te da estar en un set de filmación la que va haciendo que tu trabajo sea cada vez mejor".

"En la medida en que hacés una película y otra y otra, adquirís otro bagaje y algo del oficio, sin caer en los tics o la repetición, te va dando cierta seguridad para encarar distintos personajes", repasa.

UNA TRAYECTORIA IMPORTANTE

Con 40 años y una trayectoria que arranca en 1986 con un brevísimo papel en "La noche de los lápices", Celentano tuvo su primer protagónico tres años atrás, con la cinta "Las vidas posibles", de Sandra Gugliotta.

A partir de ahí, y de su participación en la producción internacional "El pasado", de Héctor Babenco, la actriz fue solidificando una carrera cinematográfica con participaciones importantes en filmes como "Felicitas", de Teresa Costantini; "Cordero de Dios", de Lucía Cedrón y "SOS Ex", de Andrés Tambornino.

En cuanto a su trabajo con distintos tipos de realizadores y de estilos y propuestas cinematográficas, Celentano remarca "cada uno tiene su modo y uno va aprendiendo distintas cosas y enfrentando distintos desafíos".

"Hubo casos como las películas de Tambornino o Gugliotta donde improvisábamos mucho y todo terminaba resolviéndose en el set, mientras que con otros, como con Héctor Olivera (con quien está filmando "El mural"), hay un trabajo muy fuerte sobre los textos y es cero improvisación", compara.

"A veces -ejemplifica- te sentís el último orejón del tarro porque en una toma en muchas ocasiones se prioriza la excelencia técnica sobre la performance actoral pero, más allá de esto, el cine es un oficio que te obliga a un compromiso absoluto en el que te tenés que jugar en cada toma, aun cuando, al final, la elección no pasa por el lado del actor sino por otras cuestiones".

Puesta a describir sus preferencias, Celentano afirma que le gusta el trabajo en el que se pueden repetir las tomas y establecer una búsqueda.

"Los montajistas dicen que siempre la primera y la segunda toma son las mejores, pero para mí está buenísimo cuando uno tiene la posibilidad de repetir las tomas e ir buscando algo más", señala.

"Hay directores -agrega- que apuestan a eso y otros más a lo espontáneo y lo fresco, y, en algún sentido, está buena esa diversidad porque ahí es donde uno va aprendiendo a manejarse en distintas situaciones".

"Además -concluye- más allá del estilo, lo mejor que te puede pasar es que el director sepa lo que tiene que contar y que se pueda abrir el juego en el set".

Fuente: El Día