sábado, 21 de noviembre de 2009

El otro yo

Entrevista a Ulises Palomeque

El artista platense presenta su show Doble personalidad en el Teatro Espacio de arte vivo, este sábado 21 de noviembre a las 21. El ilusionismo de la ventriloquia

La magia y la ilusión tienen ese no se qué, ese qué se yo, que hacen que grandes y chicos queden cautivados por el juego, la sorpresa, el deseo esperanzado de creer en lo que los ojos ven. Una moneda está y de repente unas manos mágicas hacen que desaparezca. Ese espíritu también está en el show de un hombre y su muñeco, animado por su voz, pero con vida propia. Hay quienes hacen de la ventriloquia en un verdadero arte. El sketch provoca la combinación exacta entre la ilusión de vida de un personaje, más el humor y la picardía que se genera entre el hombre de carne y hueso y su alter ego.

Ulises Palomeque es ilusionista y ventrílocuo y junto a su mono Hércules presentan su espectáculo Doble Personalidad a las 21 horas en el Teatro Espacio de Arte Vivo (58 n° 461 e/ 4 y 5). “Doble Personalidad es un acto que construí con la intimidad y el asombro que genera el ilusionismo de cerca, que se fusiona con relatos o anécdotas de mi vida y que me permite ir generando el clima ideal para la llegada de Hércules sobre el final”, dice Ulises a Hoy, festejando la capacidad de reírse como un remedio “para el alma, que en estos tiempo necesitamos todos”.

Quienes se preguntaran por los comienzos de Ulises, difícilmente podrían adivinar que antes de dedicarse al ilusionismo fue instructor de tiro. “Durante casi 10 años brindé entrenamiento y asesoramiento en operaciones de alto riesgo y operaciones especiales (…) Pero en el año 2001 decidí dedicarme exclusivamente a la magia a tiempo completo como profesional, ya que lo que era un hobbie había empezado a ocupar la mayor parte de mi vida”.

Fue de grande que se fascinó con el ilusionismo, cuando el padre de un amigo le hizo un truco con una moneda que le “voló la cabeza”. A partir de entonces empezó a investigar de manera autodidacta hasta llegar a dar conferencias en Argentina y en otros países sobre magia con monedas. “En nuestro país no hay magos hasta el momento que puedan realizar un acto entero de magia con monedas”.

El interés por la ventriloquia le surgió después de leer un libro de Edgar Bergen, How to become a ventriloquist (de 1938), entonces empezó a jugar. “Cuando vi que ese juego me permitía crear una ilusión diferente como lo es la creación de un carácter con vida propia, sentí que ese era el siguiente escalón como desafío para mí como artista, la creación de ‘vida’ a través de la ventriloquia”.

Uno se pregunta, siendo esta una disciplina tan peculiar, si cualquiera, desarrollando técnicas, puede ser ventrílocuo. Ulises a esto contestó: “Cualquiera puede estudiar las técnicas, no obstante, no todo el mundo podría llegar a ser ventrílocuo. El desarrollo es gradual, lleva tiempo, paciencia y sobre todo mucha concentración y coordinación, ya que el ventrílocuo no sólo debe hablar por dos, sino que además debe coordinar el manejo del muñeco a medida que ocurre el diálogo. La ventriloquia es todo un arte y exige muchísimo de uno para que luego en la práctica se cree la ilusión de que el muñeco tiene vida propia”.

Hércules, el personaje mono que acompaña a Ulises en los shows, fue construido por Franco Medici, “uno de los mejores artesanos que existe en Latinoamérica en la construcción de muñecos de ventriloquia”. Palomeque siempre disfrutó de los muñecos animales. “Es muy atractivo cómo los seres humanos extrapolamos nuestras conductas a ellos. Lo vemos todo el tiempo en el trato con las mascotas que se las humaniza continuamente, entonces quise ir más lejos y llevar las relaciones humanas a la perspectiva de un mono”.

Después de dos meses que tardó la construcción del mono azul, vino el trabajo en el carácter y la personalidad. En esto le ayudó el hecho de haber estudiado psicología: “Me permitió poder trabajar en la creación de un carácter uniforme, es decir que las actitudes concuerden con la ideología del personaje y el explotar los contrastes entre su visión y la mía, que son completamente diferentes, eso es lo que hace que el público se divierta”.
Justificar a ambos lados
Fuente: Hoy
Entre sus influencias en el ilusionismo se encuentran David Roth, Darwin Ortiz, Tommy Wonder y John Ramsay. “Son pilares gigantes, desconocidos por la mayoría del público, porque ellos dedicaron sus vidas no sólo a hacer magia sino a crear magia y teorías y escuelas de pensamientos para nosotros los magos. Y en la ventriloquia me genera una enorme responsabilidad decir que Chasman para mí fue el mejor, lo vi cuando tenía 8 años y cuando yo ya era más grande y sigo creyendo que es insuperable. De todas maneras yo no voy por ese estilo tan marcado y personal que él solo dominó con tanta maestría, sino que me identifica más el estilo de Jeff Dunham, porque marcó un ritmo y una independencia en la relación entre el ventrílocuo y el muñeco que encaja mejor con mi búsqueda artística”.

Ulises es convocado en distintos lugares para dar seminarios y cursos, no sólo por su talento sino por sus concepciones y respeto al oficio. Más allá de las técnicas, a él le interesa transmitir que “el ilusionista es un artista, pero para que sea y tenga el auténtico derecho de llamarse artista, hay que cultivarse como persona, tratar bien al público y tener modales y que se destaque por el amor a su profesión, el esfuerzo a querer mejorar continuamente y que emplee en su vocabulario frecuentemente las palabras ‘por favor’ y ‘gracias’.(…) Uno no es artista por habilidad, sino por lo que puede irradiar como ser humano primero. El arte que uno elije es el medio para poder plasmar en el escenario lo que uno quiere decir”.

Fuente: Hoy

1 comentario:

Anónimo dijo...

Yo vi el show, muy bueno el mono parece que estuviera vivo es increible. Ojala vuelva pronto a la ciudad.